Reinventando la salud, redefiniendo tu futuro

Pacientes crónicos y tecnología

Pacientes crónicos y tecnología Onalabs

Para ver la importancia de la teleasistencia en nuestra sociedad, hay que tener en cuenta el cambio demográfico con el incremento de la esperanza de vida y disminución de la natalidad. España ocupa el cuarto puesto en longevidad de los países desarrollados con una esperanza de vida en hombres de 81 años y de 86 en mujeres; además, la población envejecida supone el 19% de la población total.

Este envejecimiento poblacional va acompañado de un aumento de la prevalencia de las enfermedades crónicas o de larga duración que precisan de un control adecuado y cercano por parte del paciente y de los profesionales sanitarios. Los pacientes crónicos representan el 80% de las consultas de atención primaria y el 60% de las estancias hospitalarias. Además, el 40% de los pacientes pluripatológicos padecen tres o más enfermedades crónicas.

En esta situación y en un entorno de incremento de la demanda sanitaria, mayor inclusión de las nuevas tecnologías y mejora de acceso a la innovación, el sistema sanitario, con el fin de garantizar el acceso, calidad y sostenibilidad, se reorienta hacia los pacientes crónicos, garantizando una atención integral, coordinada y continua, mediante la necesaria  colaboración de los profesionales sanitarios y de los pacientes en su implicación en el uso adecuado de los recursos disponibles. Acción que se consigue mediante el empoderamiento del paciente, lo que significa un paciente implicado, responsable, bien informado y con los medios que faciliten su autocuidado y su relación con el profesional sanitario.

Los estudios sobre preferencias de las personas mayores, muestran su voluntad de permanecer en el hogar el máximo tiempo posible, para lo que la tecnología orientada a la teleasistencia activa y personalizada en el hogar es fundamental. De hecho, hay experiencias que muestran resultados positivos en el paciente (mejor percepción de seguridad, mayor autonomía y más tranquilidad de la familia), junto a disminución de descompensaciones por empeoramiento de su enfermedad, menos emergencias y, por tanto, disminución del consumo de recursos sanitarios, facilitando el fomento de hábitos saludables y el envejecimiento activo.

En este entorno, la tecnología permitirá la digitalización de los hogares, transformando el domicilio en un centro de cuidados, mediante su conexión con el sistema sociosanitario donde estén los profesionales que cuidan y atienden los pacientes. Este sistema debe ser integrado a nivel local, que incorpore e interrelacione todos los recursos: atención domiciliaria, atención primaria, hospitales de agudos y de media y larga estancia y residencias de mayores.

Por tanto, el reto de nuestro sistema sociosanitario es conseguir la integración de la tecnología que permita la teleasistencia como un recurso accesible a la población.

Hay que aprovechar la situación actual generada por la Covid19, que ha actuado como un acelerador del cambio a una sociedad más digital, observando una mayor aceptación del paciente a la medicina no presencial, una desestigmatización de lo digital y un incremento del “teletodo”: telemedicina, telecuidado, telemonitorización, …, que facilita una mayor incorporación de la tecnología en nuestra vida diaria.

Autor: Eugeni Sedano i Monasterio PhD, Ex Director de Public Affairs en ESTEVE y miembro del advisory board de Onalabs.

Otras Entradas

Proyecto Inshape | Onalabs

Proyecto INSHAPE

A medida que Europa enfrenta desafíos crecientes relacionados con los estilos de vida inactivos y las enfermedades crónicas, el proyecto I3-INSHAPE, liderado por Blautic, emerge

Leer más